El Dios de Temperley atiende en Miami

Perfiles Random
4 min readSep 29, 2020

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“Hermanitos queridos, Dios me los bendiga, que bendición estar saludándolos”. La frase con la que el pastor Milad Solemaini saluda a sus seguidores en todos sus videos es una mezcla de almacenero de barrio y cuñado confianzudo y turbio. Hace ya un par de años que Solemaini se radicó en Miami con su familia. Entonces, a su saludo le agrega: “Desde la soleada Miami, en Florida”. Antes de vivir en Estados Unidos, Solemaini era el pastor de La casa del alfarero, una iglesia evangelista en Temperley. Desde que se mudó a Miami, el instagram de Solemaini mezcla tres cosas: mensajes de Dios, exorcismos, y viñetas de la vida del pastor en Miami: relojes, autos, camisas floreadas, pelo engominado. Para entender cómo interactúan estos tres elementos, y por qué Solemaini funciona como un producto espiritual propio de esta época, hay que saber algunas cosas sobre la iglesia evangélica pentecostal.

La primera es que la iglesia evangélica, a diferencia de la católica, fomenta la prosperidad de sus seguidores. La teología de la prosperidad, uno de los puntos clave de esta iglesia, sostiene que que la bendición financiera y el bienestar físico son siempre la voluntad de Dios. De hecho, se establece una especie de pacto entre Dios y los creyentes: si los humanos creen en Él, obtendrán seguridad y prosperidad. Entonces la prosperidad es evidencia de que uno está en paces con Dios. De hecho, los fieles pueden crear su propia iglesia. La narrativa siempre es la misma: a través de una “revelación”, cualquier seguidor puede convertirse en pastor evangélico. En el caso de Solemaini, él mismo confiesa que fue adicto a la cocaína y que gracias a Dios recuperó su fé y encaminó su vida. La casa del alfarero, su iglesia, puede verse como su emprendimiento, el trampolín a la vida que vive hoy.

En un video de su canal, Solemaini resume la teología de la prosperidad: “Dios quiere que tengas tu casa, tu auto; Dios quiere verte bendecido, prosperado en victoria: así como vas a vivir en el cielo, bendecido, vas a vivir en la Tierra. Por eso no a la miseria, sí a la abundancia”. El pastor, hablando desde Miami, suena como un modelo no solo espiritual sino también aspiracional. Funciona como un modelo de éxito. Pero a diferencia del modelo emprendedor, que pone en el centro al sujeto, la iglesia evangélica suma a Dios a la ecuación del éxito.

La otra característica de la iglesia evangélica es la dimensión performativa, mágica. A diferencia de otras iglesias, para los pentecostales el Mal no es una dimensión abstracta, una metáfora, sino algo concreto, una fuerza espiritual concreta que amenaza la salud o el bienestar de las personas. De esta manera, Dios aparece para combatir este mal a través de los pastores. De ahí que en el instagram de Solemaini aparezcan permanentemente los exorcismos. A través del elemento teológico de la revelación, el pastor acciona los resortes de Dios y puede curar el mal que aqueja a la persona, y que amenaza su salud o su prosperidad.

Milad Solemaini practica exorcismos desde los principios de su carrera. En una especie de trailer de su trabajo en La casa del alfarero, Solemaini enumera las maldiciones del enemigo que se dedica a curar: “Los demonios del sida, cáncer, leucemia, artrosis, artritis, ceguera”. Según él mismo, en su ministerio 54 personas se curaron de sida. Los exorcismos son actos físicos, con el pastor gritando, transpirando. Los videos de la primera época del pastor, exorcizando demonios en una iglesia oscura, con publicidades de Herbalife de fondo, contrastan con los últimos, en los que el pastor exorciza desde su sillón blanco. Es como ver el ascenso de una banda de rock: desde los sótanos under al brillo del mainstream.

Otro elemento importante en la popularización de la iglesia evangélica pentecostal fue el llamado televangelismo. Sobre todo en la década de los 70 y 80, cuando el medio estaba en su apogeo, el fenómeno acercó el mensaje evangelista a millones de personas. En Latinoamérica, el más conocido es el canal Pare de sufrir, de la Iglesia Universal del Reino de Dios, que también es pentecostal. A través de una plataforma de medios, que incluye libros, diarios, revistas y películas, este culto alcanza los ocho millones de fieles solo en Brasil. La Iglesia Universal del Reino de Dios cuenta con 4.700 templos instalados en 172 países, y 9.600 pastores.

Desde sus redes, Solemaini lleva adelante MILADTV, una especie de reality en el que reflexiona sobre la vida espiritual pero también muestra su lujosa vida material en Miami. De vez en cuando, deja caer alguna reflexión política “Todos los argentinos que hoy están viviendo en Estados Unidos están acá gracias a Dios y al Turco Menem”, “Yo lo quiero a Albertito, pero quiero que Dios le dé un plan”. A veces reflexiona sobre sí mismo: “Hay que desconfiar de los tapados, los que no dicen qué hacen. Yo soy así como me ven, soy transparente”.

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